Tue. Apr 23rd, 2024

La historia de la vida de Walton está en buenas manos con el director James, quien tiene un toque poco común para los deportes y las personas que los practican (“Hoop Dreams”, “Prefontaine”). En viajes largos, James se preocupa por partidos específicos con aquellos que compartieron el centro de atención con Walton, especialmente cuando Walton llegó a las Finales de la NBA con los Blazers en el ’77, y luego con los Celtics en el ’86. Pero el interés en este proyecto formal pero convincente se trata principalmente de recuerdos emocionales, por lo que se nos trata con una gran cantidad de recuerdos improvisados ​​​​de sus compañeros como Larry Bird, Abdul Jabbar, World B. Free y otros. James crea el tipo de reuniones en las que los amigos, la familia y los compañeros de equipo son lo mismo, y abundan las anécdotas. Te da vértigo escuchar lo que se compartió extraoficialmente, pero en este raro caso, es obvio que no se dijo nada malo sobre Walton.

James cuenta esta carrera en la cancha con detalles amorosos, con un gran enfoque en su caída emocional cuando las lesiones en el pie y la rodilla comenzaron a hacer que se quedara fuera durante cientos de juegos en total, mientras que los contratos aseguraron que ganara dinero en el proceso. El documental no completa la idea de cómo un hippie ciclista también podría convertirse en el jugador mejor pagado en ese momento, pero llega al núcleo emocional de cómo esos acuerdos no hicieron que Walton no jugara, y la culpa de decepcionar a sus compañeros de equipo, más fácil de aceptar. En los momentos menos joviales, Walton tiene una gran seriedad ante la cámara que insinúa cómo se sintió durante sus años más oscuros.

A lo largo de las docuseries de James, Walton se viste con camisas teñidas, proclamando un amor por Grateful Dead que ha sido duradero y conmovedor. Descubrió la música de Jerry García y compañía mientras ascendía como un fenómeno del baloncesto, y solo ha buscado transmitir la onda. (“Bill nos convirtió a todos en fanáticos de Grateful Dead”, comenta Larry Bird.) Y la banda ayuda a contar su historia: James coloca un tesoro completo de canciones de Grateful Dead sobre el metraje del juego de Walton, y pone un marco de teñido anudado a los más de doc. secciones típicas impulsadas por fotografías. A medida que “El hombre más afortunado del mundo” avanza y retrocede en su carrera, destaca a sus compañeros de equipo como Maurice Lucas y muestra las habitaciones con temas de rockero de Walton, la presencia de los Muertos aquí se vuelve instructiva. Esta docuserie de cuatro horas es simplemente genial, hombre.

By Sandra Winters

Writer | Author | Wordsmith Passionate about crafting stories that captivate and inspire. Published author of [Book Title]. Dedicated to exploring the depths of human emotions and experiences through the power of words. Join me on this literary journey as we delve into the realms of imagination and uncover the beauty of storytelling.