Thu. Apr 25th, 2024


por Jenna Clark, editorial invitada

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Cuando entré en el teatro Marriott Marquis para ver ‘Beetlejuice’, no tenía idea de en qué me estaba metiendo. Todo lo que sabía era que este musical estaba basado en una vieja película de la década de 1980. No me tomé el tiempo para investigar la trama porque quería experimentar el programa por mí mismo sin prejuicios.

Tan pronto como Lydia Deetz (Elizabeth Teeter) subió al escenario con su vestido negro y sus botas negras en el funeral de su madre, supe que me esperaba un viaje de autorreflexión.

Tanto mi abuelo materno como paterno fallecieron en un lapso de tres meses cuando yo tenía dieciocho años. Este fue un momento extremadamente doloroso para mí, ya que la muerte de mis abuelos había sido una de mis primeras experiencias con el dolor.

A pesar de que han pasado cinco años, a menudo todavía parece que el dolor no ha disminuido. Cada día tengo miedo de seguir adelante porque no quiero olvidarme nunca de ellos de la misma manera que Lydia expresó el miedo de olvidar a su madre si tuviera que seguir adelante con su vida.

Al igual que Lydia, mi guardarropa consistía y sigue consistiendo en mucho negro. Creo que usé y sigo usando el negro como una forma de expresar mis emociones sin tener que hacerlo verbalmente.

Disfruté todos los números musicales de la obra y pensé que abordar el tema pesado en forma de canción hizo que el contenido fuera más fácil de digerir además del alivio cómico salpicado por Beetlejuice (Alex Brightman) o Delia (Leslie Rodriguez Kritzer).

Mis canciones favoritas del musical fueron “Dead Mom” ​​y “Say My Name”. Encontré que estas eran piezas extremadamente poderosas y las usé para reflexionar sobre mis emociones y procesar mi dolor persistente durante todo el espectáculo.

Si hay algo que me llevo de esta producción es que el camino del duelo tras la muerte de un ser querido es diferente para todos. Mientras que algunos pueden optar por distraerse del dolor como lo hizo Charles Deetz (Adam Dannheisser) cuando se negó a decir el nombre de su difunta esposa, otros, como Lydia, pueden optar por reconocer sus emociones. Todas son formas igualmente válidas de afrontamiento.

By Sandra Winters

Writer | Author | Wordsmith Passionate about crafting stories that captivate and inspire. Published author of [Book Title]. Dedicated to exploring the depths of human emotions and experiences through the power of words. Join me on this literary journey as we delve into the realms of imagination and uncover the beauty of storytelling.