Thu. Mar 28th, 2024

Este es el mensaje que entregó desde Rancho La Puerta, el spa que abrió en Tecate, México, con su esposo cuando tenía 17 años.—Chaz Ebert


Sí, hoy es mi cumpleaños número 100

por Deborah Szekely

Me desperté temprano en Rancho La Puerta, escuchando los sonidos de algo que sucedía en el césped afuera de mi casita, tal como lo hacía cuando Sarah y Alex eran pequeños. “Cállate”, les susurraba. “¡Vamos a vestirnos!” En ese entonces, permitíamos la entrada de autos a la propiedad, así que podía escuchar que muchas puertas se cerraban suavemente. Los miembros del personal estaban llegando. Se estaban preparando mesas con grandes ollas de chocolate caliente. Los tamales y conchas estamos listos.

A las 7:00 am, salí por la puerta principal todavía en bata de baño (una tradición) y fui recibido por una banda de mariachis a todo volumen, la trompeta resonando en las colinas, el gran bajo resonando y los violines aullando. El patio se había convertido en un emparrado de flores. Y un querido amigo, José Lupe, me ha traído una rosa por año de mi vida desde que tenía 30 años. Qué maravillosa manera de empezar el día!

Había rocío en la hierba. El amanecer se inclinaba hacia el monte Kuchumaa, pintándolo de un índigo místico y apagado. Varios cientos de voces rompieron a cantar Las Mananitasla tradición mexicana en los cumpleaños.

Despierta, mi bien, despierta. Despierta, querida, despierta.

En medio de todos los saludos y disfrutando del chocolate caliente y conchas, me di cuenta: soy una estadística y una curiosidad: solo 1,73 de nosotros (¡de mí!) De cada 10.000 personas vivimos tanto tiempo. 100! Para mí, es solo un número en el papel. no puedo aceptarlo De ninguna manera puedo ser 100!

Mi gratitud por mi larga vida es inexpresable. El número, sin embargo, no tiene sentido para mí. Aquí estoy a los 100 años, pero todavía me siento como la joven que llegó aquí con Edmond en 1940. Todavía tomo un sinfín de decisiones en mi vida, grandes y pequeñas. Todavía se espera mucho de mí, y espero mucho de mí mismo. No estoy preparado para ser tan “viejo”. Por un lado, muchas personas se me acercan y me preguntan cuál es mi secreto, qué palabras de sabiduría puedo compartir. Y me quedo sin palabras.

By Sandra Winters

Writer | Author | Wordsmith Passionate about crafting stories that captivate and inspire. Published author of [Book Title]. Dedicated to exploring the depths of human emotions and experiences through the power of words. Join me on this literary journey as we delve into the realms of imagination and uncover the beauty of storytelling.