En el momento en que reservó su primer Vogue en 2013, declaró a la revista: “Tuve la oportunidad de llevar ropa muy bonita. Estaba muy agradecida. Dejaba que el estilista y todo el mundo me guiaran porque, por supuesto, ellos sabían más y podían llevarme al siguiente nivel”.
Y ahora que está entrando en una nueva década -celebra su 40 cumpleaños el 25 de octubre- puede apreciar que “menos es más”, reconoce. Pero a veces sigue siendo divertido, por ejemplo, lucir un poco de tanga y un tatuaje protésico de mariposa.
“Mis atuendos para la alfombra roja varían en función del lugar al que voy o del tema del que se trate, pero tengo dos opciones”, explicó. “O me vuelvo exageradamente rara y divertida, salvaje y chiflada, o me vuelvo elegante, evolucionada, de diseño, preciosa”.
Sea como sea, Perry domina el arte de dejar a todos boquiabiertos. Echa un vistazo a los looks que demuestran que Perry brilla más que la luna, luna, luna.